Soldado griego, hoplita:
Tu escudo defiende lo más puro y cierto.
Tu lanza incansable se alza,
desgarrando esclavitud y muerte
Soldado griego, hoplita:
Tu razón me ilumina en la selva oscura.
Tu casco alado, penacho de oro
Es divina ofrenda que te enciende
Enviado de los dioses,
Tú eres paz y justicia.
En tu asta la virtud
Atraviesa mi negrura
Pues yo soy la barbarie, heraldo del viento arreciante.
Yo traigo la mezcla y la sangre,
Y el azul de Babilonia donde no alcanza el tiempo.
Yo soy el Caos que tu Sol no detiene,
Mar de arena que te ahoga la mente,
Nube eterna, noche perenne
Pues yo soy la barbarie, heraldo del viento arreciante.
Yo traigo la mezcla y la sangre,
Y el azul de Babilonia donde no alcanza el tiempo.
Ares te proteja desde su carro.
Unte de olvido tu
Dorado muro
No hay comentarios:
Publicar un comentario