Sin camisa, lo sé, te gusto más
Yo no te quito la tuya, de hierro
Remendada con instinto y clepsidras
Yo no te quito la tuya, y no vivo
Porque el frío desnudo me quema
Es igual
Sin camisa, supongo, va todo mejor
Podré pegarme a tu piel como un velcro
No más licra, ni paño, ni lana, ni goma
Podré abrirte un botón, y mirar dentro
Y cuando se me pegue tu sudor,
No quede carbón en tu vientre,
Respire tu aire viciado, enfermo,
Mi pelo te pinche,
Y no sane mi herida
Voy a coger mi camisa
Levantaré un muro
Entre el horizonte y el cielo
Rastrearé mi rastro arrastrándome
Y volveré a mirarte
Seré un ciego más
Mi camisa, no sé dónde está
¿De verdad la llevé puesta?
Será el frío
Seré yo, perdido
¿La inventó el dedo, o el ojo?
Es igual
Sin camisa, tal vez, ni te gusto más
1 comentario:
Me ha parecido bastante bueno.
Me gusta leer poesía aunque no sea ningúna experta en el tema(metricamente hablando)pero cuando te hace ponerte en la piel del que escribe yo diría que es buena porque transmite y tú (me)has trasmitido, ale, un beso Javi.
Publicar un comentario